Ejercicios en la vida cotidiana

Algunas sugerencias son:

Es posible que  las personas con la EP avanzada no puedan seguir programas comunes de ejercicios debido a los cambios en sus habilidades físicas o intelectuales. Quizás funcione mejor la incorporación  de ejercicios y elongaciones dentro de la rutina diaria.

  • Sentarse y alcanzar objetos estira los músculos de los brazos  y del tronco.
  • Pararse o marchar en el lugar, mientras se sostiene de una silla o una mesa ayuda a mejorar la circulación y la flexibilidad.
  • Los quehaceres domésticos como doblar la ropa, sacudir, lavar platos o ayudar a preparar la comida son un ejercicio suave.
  • Jugar juegos simples con niños, como voleibol con un globo, jugar con una pelota grande y liviana o soplar burbujas de jabón también se considera como ejercicio suave.
  • A algunas personas les gusta bailar. Si el equilibrio es un problema, pruebe a bailar sentado en una silla. “Dirigir la orquesta” al ritmo de la música rápida ejercita la parte superior del cuerpo y es una excelente terapia emocional.
  • Agregue algunos movimientos adicionales de brazos y piernas mientras se viste.